Luciana López

Mini Biografía tejida

Primera vez
No se si fue exactamente esa vez, pero me parece que la primera vez que “agarré” las dos
agujas para aprender a tejer fue con mi abuela Gladys en la vereda de su casa y seguro
tenía 5 años, todas las primeras cosas importantes que recuerdo de mi infancia me pasaron
a los 5 años.
No me acuerdo si me fue fácil o difícil aprender, lo que sí recuerdo es que tejía y destejía las
veces que fuera necesario para que el tejido me quedara, prolijo, perfecto, lindo, y fue por
eso mismo que me frustré. En la adolescencia veía a mis amigas tejer, mis abuelas tejían,
mi mamá, mis tías, pero yo, nada, todavía seguía frustrada respecto a mi capacidad de
tejer.

El reencuentro
En el 2006, lejos de aquellos 5 años, empecé a estudiar Diseño Textil y Moda en el Centro
de Diseño Industrial (actual EUCD). En ambos, primer y segundo año de la licenciatura,
había una materia que se llamaba Tejido de Punto. En el primer año, maravilloso, se veían
técnicas manuales de tejido, sobre todo el tejido en dos agujas. Este fue mi reencuentro, y
la chance de amigarme con esta técnica que luego se convertiría en una pasión, en una de
esas cosas que, honestamente, amo hacer. De acá en adelante todo lo relacionado al tejido
sería aprendizaje, ganancias y mi lado del bien.

Mi lado del bien
Tuve la suerte de hacer mi pasantía laboral en una empresa que admiro, Manos del
Uruguay, y aprender sobre los procesos creativos y productivos, sobre las diferentes fibras:
lana, seda, lino, alpaca, etc, y también sobre el admirable oficio de tejer.
Fui docente durante 7 años en la materia Tejido de Punto en la misma escuela que me
formé, la Escuela Universitaria Centro de Diseño. También tuve la grata experiencia de dar
clases y talleres de tejido en la escuela de diseño Peter Hamers Fashion Design School.
Trabajé en una empresa muy querida por la comunidad de tejedores, malabrigo, un
emprendimiento uruguayo que produce y exporta hilados de lana merino. Aquí pude
entender más sobre la comunidad mundial del tejido y conocer talentosos diseñadores y
tejedores de diferentes partes del mundo.

Hoy y mañana
Al día de hoy sigo aprendiendo, experimentando, mejorando mi técnica y diseñando a
través de dos proyectos personales y uno en conjunto. Todos nacen desde y por el tejido:
Los Lupins, un mundo fantástico de muñecos tejidos.
Lucianaloop, un espacio donde diseño piezas de tejido de punto y escribo las indicaciones
detalladas para que otras personas las puedan reproducir mientras disfrutan de sus dos
agujas.
Laboratorio de tejido: Un proyecto educativo, largamente añorado, que compartimos con
Verónica, una amiga que también llegó entré madejas y agujas.

Curiosidad

Me pueden encontrar en varias redes sociales, y ver en lo que anduve y ando.
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